Quiero agradecer a VIZ Media por permitirme leer Asadora!, Vol. 8.

        Ya no se cuáles tomos de Asadora! He leído y cuales no, pero no me quejo, la historia de Naoki Urasawa funciona y te mantiene atrapado. Debo admitir que en comparación con los otros tomos, este es bastante lento, no hay acción trepidante y trata más bien de explicar o soltar nudos que se hicieron en tomos anteriores.

        Lo bueno es que de tener conocimiento de historia global y japonesa habrá para diversión para rato, los guiños constantes de Urasawa son una delicia. El que más me ha costado es Nomajin, pero como estas reseñas no son para destripar ahí se los dejo. Ahondamos ahora en los anhelos de la protagonista principal y sus dos compañeras de colegio, vemos como poco a poco se han ido realizando y esto es algo que el autor hace muy bien, ir creciendo a sus personajes mientras avanza la historia, dotándolos de una tridimensionalidad que en ocaciones otros autores parecen olvidar.

        Como dije en un principio, este tomo no es para sobresaltos, es para disfrutar de Asa y sus amigas, una pausa en la aparición del Kaiju y su enfrentamiento con la protagonista, pero que refresca la memoria. Desgraciadamente debo admitir que extrañe los sobresaltos y los finales de suspenso de tomos anteriores. Vamos que estoy entre quererlo y no quererlo, por eso siempre he preferido las historias largas leerlas cuando están terminadas y no poco a poco.

        Estamos seguros que el siguiente volumen de Asadora! volverá con más acción, pero mientras, este tomo es para sentarse, reposar y terminarlo con calma.